Las dos vasijas

Un cargador de agua de la India tenía dos grandes vasijas que colgaban a ambos extremos de un palo. Una de ellas era nueva y reluciente, mientras que la otra era muy vieja. La vasija nueva era feliz porque hacía bien su trabajo. Su compañera, consciente de la situación, se sentía triste porque el agua se le escapaba a través de las grietas.

Al cabo de un tiempo, la tinaja ajada por los años se sinceró con el aguador: «Estoy avergonzada porque, por mi culpa, sólo puedes entregar a tu amo la mitad de mi carga». El la miró compasivo y le pidió un favor: «Cuando regresemos a la casa del señor quiero que te fijes en las hermosas flores que crecen en el camino».

Así lo hizo y, en efecto, eran muchas las flores que crecían junto al sendero. Al llegar a su destino el cargador le preguntó: «¿Te has dado cuenta de que sólo hay flores en el lado del camino por donde tu pasas?» «Hace unos años -prosiguió- sembré semillas de todas esas preciosas plantas que has visto, y con las flores que tu riegas cada día, hago ofrendas a mi Dios. Si no fueses así como eres no podría venerar a mi Dios con flores tan bellas como las que recojo gracias a ti.

«¿Te has dado cuenta de que sólo hay flores en el lado del camino por donde tu pasas?»

Publicaciones Similares

  • Leyenda de los Atrapasueños

    Hace mucho tiempo cuando el mundo era aún joven, un viejo chamán Lakota estaba en una montaña alta y tuvo una visión. En esta visión Iktomi -el maestro de la sabiduría- se le aparecía en forma de una araña. Iktomi hablaba con él en un lenguaje secreto, que solamente los iniciados lakotas comprenden. Mientras hablaban entre ellos, Iktomi -la araña- tomó un trozo de madera del sauce más viejo. Le dio forma redonda y con plumas que tenía a mano, pelo de caballo, cuentas y adornos… empezó a tejer una telaraña. Hablaron de los círculos de la vida, de cómo empezamos la existencia como niños y crecemos, pasando de la…

  • |

    Leyenda sobre el origen de los sentimientos

    La leyenda de los sentimientos es frecuentemente atribuida a Mario Benedetti, quien no la escribió realmente. Se ha dicho que es una versión corregida de un cuento de otro au tor. Realmente no es importante quién la escribió, lo que importa es que es una hermosa historia que nos deja una gran enseñanza. Cuenta la leyenda que en algún lugar de la Tierra se reunieron las diferentes virtudes y vicios de los humanos. El Aburrimiento empezaba a contagiar a los demás, por lo que Locura convenció a todos de jugar a las escondidas. Intriga se vio interesada y Curiosidad preguntó todo acerca de ello. Sabiduría aseguró que se trataba de…

  • Ni tú ni yo somos lo mismo

    El Buda fue el hombre más despierto de su época. Nadie como él comprendió el sufrimiento humano y desarrolló la benevolencia y la compasión. Entre sus primos, se encontraba el perverso Devadatta, siempre celoso del maestro y empeñado en desacreditarlo e incluso dispuesto a matarlo. Cierto día que el Buda estaba paseando tranquilamente, Devadatta, a su paso, le arrojó una pesada roca desde la cima de una colina, con la intención de acabar con su vida. Sin embargo, la roca sólo cayó al lado del Buda y Devadatta no pudo conseguir su objetivo. El Buda se dió cuenta de los sucedido y permaneció impasible, sin perder la sonrisa de los…

  • Sobre la existencia de Dios

    Buda estaba reunido una mañana sus discípulos cuando se les acercó un hombre. —¿Existe Dios? —preguntó. —Sí —respondió Buda. Después de comer, se acercó otro hombre. —¿Existe Dios? —quiso saber. —No, no existe —dijo Buda. Al final de la tarde, un tercer hombre hizo la misma pregunta. —¿Existe Dios? — —Tendrás que decidirlo tú mismo —respondió Buda. —Maestro, ¡qué absurdo! —dijo uno de sus discípulos—. ¿Cómo puedes dar respuestas diferentes a la misma pregunta? —Porque son personas diferentes —respondió el Iluminado—. Y cada una de ellas se acercará a Dios a su manera: A través de la certeza, de la negación o de la duda.