Pierde el miedo a la soledad

soledad¿Es normal tener miedo a la soledad?
El miedo a la soledad está directamente relacionado con nuestro desarrollo emocional. Si emocionalmente vamos creciendo a la vez que cumplimos años, la soledad nos da bienestar y nos hace vivir de forma plena, pudiendo crear relaciones sanas, maduras y sin dependencias.

Cuando somos niños nos asusta la soledad porque nos sentimos indefensos.

Vamos creciendo y oyendo a los adultos repetir una y otra vez, que si nos portamos mal nos quedaremos solos. Esta es una de las malas informaciones que nos quedan grabadas. A medida que nos hacemos mayores, este miedo tiene que ir desapareciendo de forma paulatina, hasta que se va trasmutando en esa sensación de paz que nos dan los momentos de soledad.

Estamos programados para vivir en comunidades…
Aunque hay personas que prefieren vivir mas alejados de los centros urbanos, hacer retiros alguna vez para hacer un «reset» o que tienen el hábito de meditar a diario para tener ese momento de encuentro interior.

Por eso es que cuando dejamos de ser niños, el miedo a la soledad no es normal y hay que prestar especial atención a este sentimiento porque si persiste es un bloqueo que nos limitará durante nuestra vida.

¿Por qué hay personas que nunca pueden estar solas?

Las personas que no pueden estar solas, o que buscan aturdirse para no escuchar su interior, son personas dependientes y con una gran carga de inseguridad. Para compensar este miedo a la soledad se rodean de gente que no siempre son de su total agrado pero se sienten compensados por esta compañía, aunque lo que logran es un sentimiento más profundo de soledad.

Estar acompañados es algo natural en nosotros, pero tenemos que aprender a sentirnos tranquilos en los períodos de soledad. Disfrutar de estos dos estados es producto de un muy buen equilibrio y un concepto claro de bienestar.

Alternar soledad y compañía es una pauta sana y necesaria que nos ayudará encontrar la dosis perfecta. Estar solos supone silencio, saber que es lo que nos gusta de verdad y hacerlo, podemos mirar hacia dentro nuestro y disfrutar de lo que oímos. Mantener un diálogo honesto y claro con nosotros mismos , y esto es algo que no todas las personas están preparadas para hacer.

Consejos para superar el miedo a la soledad

Estos bloqueos se pueden superar pero es mejor contar con ayuda terapéutica.

La meditación nos ayuda a centrarnos y a equilibrarnos.

Sólo con cerrar los ojos, estar en silencio y pensar en algo agradable es una manera de meditar. Disfrutar de un paseo y observar el entorno en silencio. Si hacemos estas pequeñas cosas, una o dos veces por semana, transformaran el estar a solas con algo necesario y reconfortante. Dar el primer paso es la manera de iniciar un largo viaje.

Te propongo un ejercicio
Busca un lugar apartado (montaña, mar, habitación tranquila de la casa…), siéntate cómodamente, cierra los ojos, respira pausadamente y podrás oír el profundo sonido del silencio.

Escúchalo y déjate inundar por de ese potente vacío.

Sigue disfrutando de este estado durante un rato.

Si haces esto a menudo y le descubres su magia, cuando estés en medio de un lugar ruidoso sabrás escuchar el silencio que también ahí existe.

Podrás apartarte en medio del caos y entenderás a la soledad como una aliada y empezarás a cuidarla como a un tesoro.

¿Sabías que…?

  • Estar en silencio solo un rato, una vez al día durante unos minutos, hace que seas mas claro en tus decisiones.
  • Te da la capacidad de poder evaluar con equilibrio las situaciones cotidianas.
  • Te ayuda a ver en ti, capacidades que desconocías, entre otras muchas cosas.
  • ¿Sabes que si estuviésemos siempre acompañados, atento a conversaciones y pendientes de lo que sucede en el exterior, enloqueceríamos?.
  • Que es el silencio y esos momentos en que estamos a solas los que hacen que sigamos siendo efectivos, capaces y resolutivos.

Ahora ya puedes perder el miedo a estar solo. ¡Disfrútalo!

Autora:

Publicaciones Similares

  • Cómo elegir un compañero para una relación

    Elige a alguien que haga tu vida más grande y no más pequeña. 1- Elige a alguien como si fueras ciego. Cierra los ojos y observa qué puedes sentir de esa persona, de su gentileza, su lealtad, su comprensión, su devoción, su habilidad para ocuparse de ti, su habilidad para cuidar de sí mismo como un ser independiente. En nuestra cultura nos basamos mucho en lo que vemos con nuestros ojos externos. Pero cuando miramos al objeto de nuestro amor, es mucho más importante lo que vemos con los ojos cerrados. 2- Elige a alguien que tenga la habilidad de aprender. Si hay algo que verdaderamente hace diferencia entre un…

  • Manifiesto por las mujeres reales

    Somos mujeres reales y nos gusta, por eso nos unimos a este manifiesto. Porque no existe un único modelo de mujer. Todas somos, por suerte, diferentes. Porque la belleza real tiene mil caras. Porque no importa que vistamos una 38, una 40 o una 44… ¡Lo que importa es que sepamos dar la talla! Porque si la arruga es bella en la ropa, ¿por qué no en la piel? Porque nos valoramos por lo que somos y lo que hacemos. Y hacemos mucho como amas de casa, médicas, estudiantes o ministras. Porque nos gusta la moda y lo que más se lleva es ser una misma. Queremos disfrutar y ser felices como somos. Si…

  • |

    Cómo hacer jabón y suavizante para la lavadora

    Con estas dos recetas tendrás la ropa perfectamente limpia, de una forma barata y respetuosa con el medio ambiente. ¡Además es divertido hacerlo! Jabón para la lavadora Ingredientes:  3 litros de agua 40 gr. de jabón de marsella (o Lagarto, o uno hecho en casa con jabón y sosa). Es importante que no tenga glicerina, porque la ropa quedaría con manchas blancas. 3 cucharadas soperas de bicarbonato sódico. Instrucciones: Rallamos los 40 gr. de jabón Ponemos a calentar los tres litros de agua. El bicarbonato lo ponemos en otro recipiente y cuando el agua esté tibia le echamos dos tazas para disolverlo bien. Cuando el agua esté bien caliente le…

  • Los beneficios de escribir un diario personal

    Salud Mental Escribir tiene excelentes beneficios para tu salud mental; además del hecho de servir como válvula de escape para las tensiones de la vida diaria, también existen beneficios a nivel cognitivo y emocional. Y no estamos hablando de escribir novelas o libros de ciencia ficción; la escritura normal y cotidiana puede ayudar a elevar tu autoestima y hacer que te sientas bien. Esto debido a que puedes revivir situaciones en un ambiente seguro donde puedes procesarlas sin miedo o estrés y encontrar mejores soluciones al tener la mente despejada. De hecho, los beneficios mentales y emocionales de escribir un diario son tales que los consejeros, trabajadores sociales y terapeutas…

  • La escalera de la dependencia – Jorge Bucay

    Consecuencias de la dependencia emocional Si la ruptura de la pareja no la aceptamos… Podemos llegar a autoengañarnos o a adoptar una actitud victimista y manipuladora para que el otro se quede conmigo. Intentaremos hacer chantaje, dar pena… para intentar recuperarle. ¿Qué ocurre si no acepto la partida del otro? Empiezo a descender por una escalera hasta llegar a lo peor de mi mismo, creyendo que busco la iluminación en el encuentro contigo. Aparecen en nuestra cabeza pensamientos negativos del tipo: ” no podré vivir sin ti”. El primer peldaño es intentar transformarme en una necesidad para ti. Me convierto en tu proveedor selectivo: te doy todo lo que quieres,…

  • Helen Keller: coraje y valentía sin límites

    Una de la personas más notables e inspiradoras del siglo pasado fue la estadounidense universal Helen Keller (1880-1968), admirable mujer que, siendo ciega y sorda, supo vencer a la adversidad y el infortunio mediante un empeño que aún asombra y cautiva al mundo entero, dado que, a pesar de sus tremendas limitaciones físicas, fue autora, activista y apasionante oradora. No inclines nunca la cabeza, tenla siempre erguida. Mira al mundo directamente a la cara. Nació el 27 de Junio de 1880 en Alabama, hija de un editor de prensa. Antes de su enfermedad era una niña con mucha vitalidad y buena salud, y con una personalidad sociable. Podía andar e…