7 Consejos para ser más feliz

feliz

  1. Siéntete feliz durante 5 minutos al día. No importa que no tengas un motivo, simplemente, siéntete feliz. Si te cuesta trabajo, recuerda los momentos más felices en tu vida, y trata de reproducir ese sentimiento.
  2. Trata de sonreír la mayor parte del tiempo. Hazlo cada que te acuerdes, y si se te olvida, puedes atar un cordón en tu dedo y sencillamente sonreír cada vez que lo veas o lo sientas. La sonrisa tiene un gran poder sobre nuestro estado de ánimo.
  3. Dedica 5 minutos diarios para relajarte y meditar. Esto te ayudará a liberarte de cualquier preocupación o angustia que no te deje en paz. Primero busca un lugar tranquilo donde te puedas poner cómodo, comienza a respirar profundamente contando hasta 4 mientras inhalas, mientras retienes el aire y al exhalar. Trata de mantener tu mente en blanco, y disfrutar el estar vivo y las sensaciones agradables de tu cuerpo.
  4. Reserva tiempo para ti mismo. Es importante que dediques al menos media hora en hacer algo que disfrutes. Puede ser leer un buen libro, ver una película, comer tu platillo favorito o simplemente  sentarte a relajar.
  5. Mira el lado positivo de las cosas. Cuando te suceda algo malo, piensa que todo tiene un lado positivo,  los obstáculos y problemas están ahí para que aprendamos alguna lección importante, y también las personas sus tienen cualidades. Si aprendes a ver sólo el lado positivo de todo lo que te rodea, te sentirás mucho mejor.
  6. Nunca critiques ni te quejes. Las personas que se la pasan criticando a los demás y quejándose de todo, malgastan su energía y se vuelven incapaces de tener éxito. Además, se vuelven pesimistas y contagian a más personas de su mal humor.
  7. Esfuérzate por lograr lo que quieres. La gente suele perderle el sentido a la vida, cuando no tiene sueños o los ha perdido. Tener metas y trabajar para alcanzarlas te ayudará a mantenerte motivado, alegre y apasionado por lo que haces cada día de tu vida. Si sabes que tu esfuerzo te traerá grandes recompensas, serás feliz trabajando en ello.

Publicaciones Similares

  • El valor de nuestras raíces ancestrales

    No estamos fijos al suelo como la mayoría de plantas pero el ser humano también cuenta con ciertas raíces que le brindan soporte y alimento, y que le conectan bajo la superficie con otros seres vivos. El ombligo y los antepasados En el centro de nuestro cuerpo convergen diversas estructuras físicas y sutiles que pueden ser fuente de meditación. El ombligo es la marca que nos recuerda que en el inicio dependíamos de nuestra madre a través del cordón umbilical que se corta al nacer. Si por un momento imaginamos esa conexión entre las madres de cada generación (desde la hija a la madre, abuela, bisabuela… como muñecas rusas una…

  • Influencia de la luna Creciente

    Esta fase es la que va de la Luna Nueva a la Luna Llena y dura aproximadamente catorce días. Está asociada al aspecto de “doncella” y por tanto a diosas como Epona, Artemis y otras diosas solteras. Es un buen momento para los nuevos comienzos y para conceptualizar ideas, pero especialmente para atraer todo tipo de cosas que queremos en nuestra vida (suerte, amor, crecimiento, cambios…)   Periodo en el cual se exterioriza más fácilmente El cuerpo saca el máximo partido de aquello que recibe para su desarrollo Es un gran momento para aprender cosas nuevas o poner proyectos en marcha   En esta fase de la Luna se le…

  • Zanahoria, huevos o café… ¿sabes qué eres?

    Hace tiempo leí una historia que desde entonces la recuerdo siempre que siento que me quiero quejar, o siempre que oigo a alguien quejarse. Tener ésta historia presente me recuerda que por muy difíciles o duras o pesadas que sean las circunstancias siempre podemos elegir transformarlas. Sólo necesitamos tener claro qué somos y ejercitar la actitud correcta sin tirar la toalla. Érase una vez una hija que siempre se estaba quejando a su padre de lo difícil que era su vida, ella siempre estaba resolviendo cosas; apenas había resuelto una cuestión que ya le estaba surgiendo otra. Y se sentía agotada y desmotivada. Un día su padre, cansado de oir sus quejas,…

  • Liderar en momentos difíciles

    Mind Workshops for extraordinary business people Las corporaciones reclaman, además de los conocimientos y la experiencia necesaria, directivos con una mente altruista y sabia. El altruismo se explicita al reclamar a los directivos que estén al servicio de los accionistas, clientes, empleados, a su propio equipo y, con la boca mas pequeña, al servicio de la comunidad y el ecosistema.  Estar al servicio de todos estos intereses sería actuar con responsabilidad universal. En mi opinión , la única manera de mantener el sistemas económico social sostenible. No conozco ninguna empresa ni ningún libro de liderazgo que plantee: “Piensa en ti mismo, en tus intereses en tú remuneración, lidera para ti…”…

  • Las trampas del camino espiritual

    Hay muchas trampas en el proceso de un camino espiritual, muchas ocasiones para tropezar, cada día y prácticamente en cada situación: El supermercado espiritual. Es una tentación andar de sitio en sitio, de escuela en escuela, de grupo en grupo, buscando experiencias fuertes y sin establecer un compromiso de autoinvestigación y práctica profunda en una disciplina concreta. Usarlo como hobby. Un entretenimiento placentero o intelectual, con escasa implicación personal. Como decía la antropóloga y maestra zen Joan Halifax, «hay aficiones peores» (y sabía bien lo que decía, ella que trabajaba en las cárceles). Pero si te lo tomas como un mero entretenimiento, no es fácil que se de la transformación…

  • |

    ¡Despéinate!

    Hoy he aprendido que hay que dejar que la vida te despeine, por eso he decidido disfrutar la vida con mayor intensidad. El mundo está loco. Definitivamente loco. Lo rico, engorda. Lo bonito sale caro. El sol que ilumina tu rostro arruga. Y lo realmente bueno de esta vida, despeina: Hacer el amor, despeina. Reírte a carcajadas, despeina. Viajar, volar, correr, meterte en el mar, despeina. Quitarte la ropa, despeina. Besar a la persona que amas, despeina. Jugar, despeina. Cantar hasta que te quedes sin aire, despeina. Bailar hasta que dudes si fue buena idea ponerte tacones altos esa noche, te deja el pelo irreconocible. Siempre va a estar más…