Cuento de Sabiduría Indígena

sabiduria-indigena
Enzo, un rico comerciante de Puerto Ayacucho, visita a las comunidades indígenas del Alto Orinoco y se horroriza cuando ve a Orawë, indígena yanomami tumbado tranquilamente en su chinchorro (especie de hamaca) mascando tabaco.

– ¿Por qué no sales a pescar? – le pregunta Enzo.
– Porque ya he pescado bastante hoy – le contesta Orawë.
– ¿Y por qué no pescas más de lo que necesitas? – insiste el comerciante.
– ¿Y qué iba a hacer con ello? – pregunta a su vez el indio.
– Ganarías más dinero. De ese modo podrías poner un motor fueraborda a tu canoa. Entonces podrías llegar lejos en el río y pescar más peces. Y así ganarías lo suficiente para comprar una red de nylon, con lo que obtendrías más pescado y más dinero. Pronto ganarías para tener dos canoas y hasta dos motores y más rápidos…entonces serías rico como yo.
– ¿Y qué haría entonces? – preguntó de nuevo el indígena.
– Podrías sentarte y disfrutar de la vida – respondió el comerciante.
– ¿Y qué crees que estoy haciendo en este momento? – respondió satisfecho el indio Orawë…

 

 

Publicaciones Similares

  • Llegar a la paz

    – Interlocutor: No ansío más conocimiento, todo lo que deseo es paz. – Maharaj: Puedes lograr toda la paz que quieras si la pides. – Interlocutor: La estoy pidiendo. – Maharaj: Debes pedirla con un corazón no dividido y vivir una vida integral y coherente. – Interlocutor: ¿ Cómo? – Maharaj: Apártate de todo lo que desasosiega tu mente. Renuncia a todo lo que perturbe tu paz. Si quieres paz has de merecerla.– Interlocutor: Todo el mundo merece la paz. – Maharaj: Se la merecen sólo aquellos que no la perturban.

  • ¿Mala suerte o buena suerte?

    Una historia china habla de un anciano labrador que tenía un caballo para cultivar sus campos. Un día el caballo escapó a las montañas. Cuando los vecinos del anciano labrador se acercaron para condolerse de él y lamentar su desgracia, el labrador les replicó: – ¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién lo sabe? Una semana después el caballo volvió de las montañas trayendo consigo una manada de caballos salvajes. Entonces los vecinos felicitaron al labrador por su buena suerte. Este les respondió: – ¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién lo sabe? Cuando el hijo del labrador intentó domar uno de los caballos salvajes, fue desmontado y se rompió una pierna. Todo el…

  • Día y Noche

    Un Maestro hizo una pregunta abierta a sus alumnos: “¿Cuándo acaba la noche y comienza el día?”. Uno de los discípulos, tras pensarlo brevemente, respondió: “Cuando miras a la distancia y puedes diferenciar a una vaca de un caballo”. Otro, por su parte, dijo: “Cuando miras a un árbol a la distancia y puedes saber si es un cedro o un pino”. El tercero agregó: “Cuando miras las páginas de un libro y puedes leerlo sin tener que encender una lámpara”. Al final, el Maestro terminó diciendo: “En verdad, sigue siendo de noche si al mirar el rostro de los hombres y mujeres que se cruzan contigo en la calle, no logra reconocerse que ellos…

  • Entrevista a la abuela Margarita, curandera maya

    Siempre es buen momento para recordar a la Abuela Margarita, curandera y guardiana de la tradición maya.  Sus enseñanzas son intemporales y siguen estando de plena actualidad. ¡Disfrutadla! Cuando viaja en avión y las azafatas le dan un nuevo vaso de plástico, ella se aferra al primero: ‘No joven, que esto va a parar a la Madre Tierra’. Rezuma sabiduría y poder, es algo que se percibe con nitidez. Sus rituales, como gritarle a la tierra el nombre del recién nacido para que reconozca y proteja su fruto, son explosiones de energía que hace bien al que lo presencia; y cuando te mira a los ojos y te dice que somos…

  • El picador de piedras

      Hace muchos años en la isla de Hokkaido, vivía el joven Humi, que se ganaba el sustento picando piedras. Aunque joven y sano, no estaba contento con su destino, y se quejaba día y noche. Humi, pese a no conocer bien el cristianismo, sabía que, según su tradición, al menos una vez al año se satisfacían los deseos de la humanidad. Así, un día de Navidad rezó con mucha fe y, para su sorpresa, se le apareció un ángel.   – Tienes salud y toda una vida por delante – le dijo el ángel – . Todos los jóvenes deben empezar a a hacer algo. ¿Por qué vives quejándote?…

  • Leyenda del amor eterno

    Un día el hijo de un bravo guerrero se enamoró de una joven muy bella y ambos decidieron casarse tras lograr el permiso de sus padres. Como se amaban tanto y sabiendo de los peligros de la convivencia, decidieron visitar al brujo de la tribu para que les preparase un conjuro que hiciese su amor y su alianza realmente eternas. El brujo le dijo al guerrero: Ve a las Montañas del Norte y sube a la más alta que encuentres y cuando estés en su cima busca el halcón más vigoroso, el más fuerte y más valiente de todos. Debes cazarlo y traerlo vivo aquí. Luego dirigiéndose a la hermosa muchacha le dijo: Tú ve…