Las actividades propias del buen tiempo, como la jardinería, el excursionismo, ir de camping, la natación… pueden producir cortes, rasguños, dolores musculares, picaduras de insectos, esguinces y muchas otras pequeñas molestias.
Entre ellas, tal vez la más peligrosa y la que tiene la mayor tasa de incidencia son las quemaduras de sol.
Aunque cuidemos mucho la protección de nuestra piel y el consumo de alimentos que aumenten la resistencia natural a los rayos del sol, es comun la sobreexposición y terminar con una quemadura dolorosa.
Realmente, la prevención es la cura más efectiva para las quemaduras solares, pero cuando a pesar de las precauciones, sucede, utilizar cualquiera de estos remedios caseros, aseguran un alivio y cura totalmente naturales:
- Aloe Vera: Cuando se trata de quemaduras por el sol, la mayoría de las personas han usado alguna vez esta plante. Es el remedio natural más común para aliviar y regenerar la piel quemada y no hablar.
- Aceite esencial de lavanda: El aceite esencial de lavanda no sólo alivia las quemaduras solares, sino que puede evitar que te peles.
- Yogurt: Aplica yogur sobre la piel quemada para ayudarte a enfriar y curar. Elije un yogur natural, sin desnatar y sin azúcar. Un yogurt casero es aun mucho más efectivo. Mantén el yogur sobre la piel hasta que se caliente y después, enjuaga con agua fresca.
- Vinagre: Llena de vinagre de manzana una botella de spray, guardala en la nevera, y después rocialo sobre la quemadura.
- Te: Haz una taza de té fuerte y luego usar un trozo de tela empapado en el té, aplicándolo sobre la zona quemada. Son los taninos que contiene té los que alivian la quemadura y curan la piel.
- Cáscaras de patata: Un remedio para las quemaduras mencionados ya en escritos antiguos son las cáscaras de patata. Proporcionan la humedad tan necesaria para el área quemada, además de tener propiedades antibacterianas que ayuda en la curación.
- Pepino: Aplica finas rodajas de pepino bien frío directamente sobre la zona afectada.
Pero cuando la piel está muy sensible al tacto … no hay nada más relajante y que alivie más que este spray.
Spray After Sun
Ingredientes (orgánicos siempre que sea posible)
- 60 ml de aloe vera
- 30 ml de agua de lavanda (hidrolato de lavanda)
- 30 ml de agua de menta (hidrolato de menta)
- 7,5 ml de glicerina vegetal
- 15 gotas de aceite esencial de lavanda
- 5 gotas de aceite de zanahoria
- 2-3 gotas de aceite esencial de menta (opcional)
- 10 gotas de aceite de vitamina E (opcional)
Método
Pon todos los ingredientes en un tarro de cristal.
Agita vigorosamente para mezclarlos.
Vierte la mezcla en una botella con aplicador en spray.
Etiqueta la botella con el nombre, el contenido y la fecha de elaboración.
(Se conserva durante 1 o 2 años, dependiendo de la calidad de las materias primas utilizadas)
Utilización
Pulveriza el cuerpo tan a menudo como desees. Ya sea en la piscina, en la playa, o en cualquier momento al aire libre para mantener la piel protegida e hidratada.
Aplica generosamente sobre la piel quemada por el sol después de la ducha y repetir la aplicación cuantas veces sea necesario.
Es seguro para toda la familia.
Consejos de almacenamiento
Guardar lejos del calor y la luz solar directa. Para un efecto de refrigeración instantánea aun más pronunciado… ¡guárdalo en la nevera!